miércoles, 7 de diciembre de 2016

UN OLITENSE ESCLAVIZADO EN LOS CAMPOS DE LOS NAZIS

Las empresas alemanas Astra, Auto Unión, Opta Radio o Zeiss Ikon utilizaron durante el régimen nazi a prisioneros como mano de obra esclava, entre ellos al vecino de Olite Lucio Gabari Espinal que trabajó para ellas en el campo de Flossenbürg, según revela el estudio que sobre republicanos vascos presos publica este mes de diciembre Ana García Santamaría en la revista Antzina especializada en genealogía e historia local.
            El reportaje añade que Gabari, al que su familia dio por desaparecido en la II Guerra Mundial, también fue empleado para explotar granito en las canteras del subcampo de Johanngeorgenstadt.
      La autora de “Mujeres y hombres republicanos de Navarra, Gipuzkoa, Álava y Bizkaia en campos de concentración nazis: Los olvidados” rescata algunos ejemplos como el del olitense, del que también detalla que había nacido el 7 de julio de 1907 y era el mayor de los seis hijos del matrimonio formado por Antonio Gabari García y Olegaria Espinal Chueca.
            Precisa, además, que tras el golpe militar de Franco en 1936 salió de Olite y pasó a zona republicana y que al acabar la guerra civil terminó en el campo de refugiados de Gurs, cerca de Olorón (Francia). A diferencia de otros compañeros de Olite que se desperdigaron por el hexágono, Lucio Gabari fue deportado el 17 de enero de 1944 en un convoy que partió de Compiègne, según escribe Ana García. Dos días después ingresó en el campo nazi de Buchenwald con el número 40189. Después fue trasladado a otros recintos para realizar trabajos forzosos como “mano de obra esclava”.
            En su trabajo en Aintzina, la investigadora recuerda que el ministro franquista de Exteriores Ramón Serrano Suñer se entrevistó en 1940 con la cúpula del III Reich y que Hitler cursó después una orden para que los republicanos hacinados en Francia fueran enviados a campos de exterminio nazis, en los que para distinguirlos se les cosió a la ropa un triángulo azul con una “S”.
            Entre 1940 y 1945, se calcula que unos 10.000 republicanos fueron deportados, si bien se trata de una investigación que todavía permanece abierta. Los nombres que aparecen en el número de Aintzina pertenecen a distintas bases de datos. Por el mismo campo de Buchenwald que Gabari pasaron Eugenio Alli Ferrero y Antonio Clemente, de Bera, o el tudelano Bernardo Zamora. En Mauthausen, por ejemplo, estuvieron internados Baltasar Ferruz Insa, de Pitillas, o Fructuoso López Urquiola, de San Martín de Unx.


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